Debo
encontrar tu sombra
Por
la sombra deshojada del agua
se
desliza tu sombra.
Mi corazón, temblando, recoge los hilos del
otoño y
comprende que en el poema que conformas
eres
como un sueño que no tiene límites.
En
los vidrios ahumados de los bares
te
dibujan mis dedos ciegos
como
una roca fantástica.
Mis labios impacientes adivinan
apenas
tu nombre en el crepúsculo,
implorando
a los dioses
por el pecado inconsútil de amarte,
a
pesar de todo, de la cal sobre los hombros.
Salgo
a buscarte,
precedido del viento,
Engarzado de alondras que mordiscan tu
ausencia,
parados en las mañanas de mi fiebre,
manos desamparadas por no asirte,
con
tu sonido musical alucinándome.
¿Adónde
está tu sangre enamorada?
¿Dónde
se oculta tu sombra demorada?
¿En
qué monasterio diáfano
tu piel se ilumina y crece?
Debo
encontrar tu sombra y tu presencia
antes
del invierno, muy adentro de mi.
Poeta
Jesús
Marìa (Còrdoba). Argentina
Publicado
en Revista Literaria “Mapuche” - Nº 65 - Primavera 2013
Gran poeta y amigo Aldo Alemán Laurencigh
ResponderEliminar