Abri, abril …
Las
idas del sol
madrugan
los amaneceres
soledades
que se encuentran
para la misma magnitud
en
horas de aciertos y raíces.
Reedición
de las primaveras
en
los infinitos almanaques
para
el renacer permanente.
de
las hebras del tejido
y
los trazos plenos,
reconstrucción
de las aspas
en
el tibio remolino
para
la fecunda siembra
en
las mentes
susurrando
las
últimas urgencias.
Todo
cabe ya
en
la pequeñez geométrica
para
el refugio de las ilusiones
mientras
el mañana
se
recuesta en la incógnita
de
otras luces prometidas.
Poeta
Rìo Primero (Còrdoba). Argentina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario